Chocolate
¿Te has preguntado alguna vez por qué el chocolate nunca se guarda en el frigorífico de tu supermercado? Es porque el efecto de enfriamiento tiene consecuencias terribles en el delicioso producto que a todos nos encanta Definitivamente, el chocolate no debe guardarse en el frigorífico. El proceso de elaboración del chocolate implica calentar y enfriar distintos granos de cacao con polvo y leche. Cualquier enfriamiento adicional puede arruinar los delicados cristales y el brillo del cacao, provocando una textura calcárea o “bloom” (una capa blanca que se forma en la superficie). Para mantener su textura suave y su sabor, conserva el chocolate a temperatura ambiente en un lugar fresco y seco. Y sí, eso incluye el chocolate blanco, ¡pero todos sabemos que en realidad no es chocolate!

Chocolate
Mermelada/Jalea
La mermelada y la jalea compradas en la tienda suelen llevar conservantes, por lo que no es necesario refrigerarlas para que se conserven frescas a largo plazo. Aunque la mermelada fría puede ser tentadora para acompañar una tostada caliente, en realidad la nevera hace más mal que bien. La humedad del frigorífico puede filtrarse en la tostada y dejarla empapada. En lugar de eso, deja la mermelada y la gelatina a temperatura ambiente para que mantengan su consistencia perfecta. Cuando las untes en una tostada caliente, se mantendrán húmedas en los lugares adecuados, sin comprometer la textura crujiente del pan. ¡Disfruta de tu mermelada sin tostadas empapadas!

Mermelada/Jalea