Aceite De Oliva
El bien llamado oro líquido es un producto muy preciado en todos los hogares, su increíble sabor y sus múltiples propiedades lo hacen indispensable en la dieta mediterránea. La mejor manera de conservarlo y de que conserve todas sus propiedades y nutrientes es dejarlo en una botella de cristal en un lugar a temperatura ambiente donde no le dé la luz solar de manera directa. Jamás hay que meter el aceite de oliva en la nevera ya que se compactará, se volverá turbio y espeso y perderá muchos de sus nutrientes y su sabor y olor.
Cebolla
Las cebollas, al igual que el ajo, no necesitan frío para conservarse, se mantienen en muy buenas condiciones de manera natural, sin refrigeración, en un lugar seco y fresco alejado de la luz directa del sol. Si las introducimos en la nevera, se pondrán chiclosas, y les pueden brotar tallos debido a la humedad, además de que les puede salir moho por el mismo motivo. Para consumirlas con todas sus propiedades y su textura, mejor fuera de la nevera.